¿Qué nos pasa con las legumbres? Este grupo de alimentos parece que se ha convertido en el hermanito pobre de nuestra dieta. ¿Cómo es posible que su consumo regular se haya reducido drásticamente en las últimas décadas? Las legumbres están llenas de nutrientes, tienen un alto contenido en proteína y son bajas en grasas, entre otros atributos. Por todo esto, son esenciales para nuestro bienestar alimentario. Así que debemos habituarnos a su consumo.
En la década de los 60 se consumían en España 15 kg de legumbres por habitante al año. En los 80 se bajó a la mitad. Y en el último estudio conocido, que data de 2018, el dato se sitúa en 3,2 kg. Una cantidad muy lejana de la recomendación de incluir, al menos, 3/4 raciones de legumbres a la semana por persona -ahora estamos en 1,4-.
LAS CAUSAS
Las peculiaridades de la vida moderna parece ser la explicación al olvido generalizado de estos productos. De hecho, durante las semanas de confinamiento se ha producido un repunte del consumo de legumbres. Pero, esta excepción debemos convertirla en habitual si queremos producir beneficios a nuestro organismo.
El primer hábito, por tanto, no puede ser otro que introducir las legumbres en nuestra dieta de forma progresiva. Si no se sabe por dónde empezar, un recurso sencillo es el humus. El conocido como paté de garbanzos se ha hecho muy popular en los últimos años, pero todavía hay mucha gente que desconoce su existencia. Lo mismo pasa con el tofu o queso de soja.
LEGUMBRES PARA TODOS
Una vez hayamos dado el primer paso, hay que ir más allá. Existe mucha variedad de legumbres y muchas formas de prepararlas. El no tengo tiempo no vale cuando nuestro bienestar alimentario está en juego. Garbanzos, lentejas, guisantes, alubias… Son una fuente de proteínas, almidón, fibra, vitaminas y minerales que no podemos ni debemos desdeñar.
¿Qué nos pasa con las legumbres para no consumirlas con regularidad? A ver, sabemos que proporcionan indudables beneficios a nuestra salud. Además, están recomendadas para diabéticos y celiacos. Los seguidores de una dieta vegetariana no tienen dudas de sus beneficios. Y, por si todo esto fuera poco, las legumbres son un cultivo clave en la agricultura sostenible. ¿Necesitamos más argumentos?